Vencido el plazo para los Objetivos del Milenio, la ONU presentó al mundo los nuevos Objetivos de Desarrollo Sostenible, 17 directrices que guiarán la consecución de un mundo más justo y vivible para todos los habitantes del planeta.
Ya no somos solo los humanos. De los 17 objetivos, 7 promueven directamente la protección del ambiente y todos los demás se relacionan en alguna medida con la conservación de los ecosistemas en los que habitamos. Parece que se superó el paradigma según el cual la naturaleza y el desarrollo entran en conflicto y terminamos de reconocer que ambos corresponden mismo hecho económico y social.
Así que ahora corresponde empezar a solucionar problemas ecosociales y el Cambio Climático parece un buen candidato para empezar debido a lo inminente y potencialmente catastrófico de sus efectos.
Venezuela es un país extremadamente vulnerable a este fenómeno como casi todos los países subdesarrollados, pero al contrario de muchos de ellos, es también uno de sus principales causantes. Sin duda, atacar el problema en nuestro país requiere del diseño de políticas públicas bien ajustadas a nuestra realidad y hay que empezar comunicando el problema y sus posibles soluciones. Recordemos que en democracia solo se hace lo que la gente pida.
Esta tarea requerirá de muchas contribuciones, y la de Provita para el año 2016 será el programa Yo Cambio, una serie de materiales educativos y divulgativos diseñados para diferentes tipos de canales comunicacionales cuyo objetivo es adaptar la discusión climática a las particularidades venezolanas, para aumentar sus probabilidades de éxito.
Durante nuestras investigaciones previas al desarrollo del programa, nos dimos cuenta de tres falencias en la comunicación sobre Cambio Climático que prevalece en el país:
1) La gente sabe que el tema es importante pero no lo comprende: Hay que cubrir una buena parte de las deficiencias en el programa educativo que hace que la gente carezca de conceptos básicos de física, química y biología que les permitan entender la escala y naturaleza del problema.
2) La gente sabe que es un problema pero no sabe para quién: Visto que la mayoría de los efectos que se publicitan del Cambio Climático son el derretimiento de polos y aumento del nivel del mar, es difícil que un caraqueño se preocupe demasiado. Hay que empezar a hablar de sequías y vaguadas que son los efectos más notables esperados para Venezuela.
3) La gente sabe que hay que hacer algo pero temen a las soluciones: Tal como está planteado el problema actualmente, la única solución es cerrar las fábricas, quedarnos en casa para no usar el carro y no consumir nada. La gente tiene miedo a lo que la lucha contra el Cambio Climático pueda representar para la economía.
Desde Provita queremos ayudar a cambiar esta percepción, especialmente en lo que respecta al tercer punto.
La lucha contra el Cambio Climático implica el desarrollo de nuevas tecnologías, de nuevos negocios, requiere de planificación y educación, de mejores servicios públicos y gobiernos locales. Es una fuerza motriz para la consecución de ciudades más agradables, campos más productivos y ambientes más sanos. Atender el problema del cambio climático puede impactar muy positivamente el nivel de vida de las personas y disminuir su vulnerabilidad, tanto climática como de cualquier otro tipo.
Pero el primer paso para esto es que las personas lo deseen y ese es el objetivo del programa Yo Cambio: que la gente hable del tema, que sepa de lo que habla y que, en última instancia, ejerza presión política para motivar los cambios necesarios.
Carlos Peláez
capelaez@gmail.com