Charo Méndez
En otros países las empresas han sentido la necesidad de diferenciar las formas de comercialización de sus productos de las de mercadeo de sus marcas, comunicando e informando a los consumidores sobre sus comportamientos responsables.  En los supermercados o farmacias, por ejemplo, aparece la oferta de champús con etiquetas certificadas como “verdes”, para que el consumidor conozca que ese producto cumplió con unas actuaciones ambientalmente responsables que fueron debidamente certificadas por terceros que lo confirman.

Artículo publicado gracias a la colaboración de la autora, y la Revista Vecino Saludable del Grupo COBECA.

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