Generación de empleo, producción de bienes y servicios.
Impacto social de los negocios
¿Quiénes son los beneficiarios de la generación de riqueza de las empresas? ¿El impacto social de la actividad económica de una empresa es lo mismo que su actuación responsable?
Charo Méndez
vecinosaludable@cobeca.com
Hay quienes sostienen que los únicos que se benefician de la generación de la riqueza de las empresas son los accionistas, dueños o propietarios. Esa afirmación es arbitraria e inexacta. La actividad comercial e industrial produce impacto social sobre distintos grupos de la sociedad, tanto en aquéllos que tienen que ver directamente con la producción de la riqueza, como en los que están vinculados de diversas maneras con esa acción.
La riqueza generada a partir de las actividades económicas (lo que algunos llamamos “la torta”) no es únicamente para los dueños. Esa riqueza o “torta” se distribuye entre varios grupos: la ganancia que reporta a sus dueños, los salarios y beneficios que otorga a sus trabajadores, los bienes o servicios que ofrece a sus consumidores, la compra de bienes y/o servicios a los proveedores, la necesaria contribución fiscal a las autoridades y, por supuesto, la contribución obligada y/o voluntaria que la empresa puede realizar hacia la sociedad.
La generación de empleo: impacto social relevante de la actividad económica
La cantidad de empleados, trabajadores y colaboradores de las empresas tienen a su vez impacto en sus familias y sobre todo en su carga familiar. La cantidad de trabajadores que son jóvenes, la cantidad de trabajadores que son mujeres, la cantidad de trabajadores que son jefes de hogar tienen impacto social distinto. La empresa, además de remunerar el trabajo, debe proveer los beneficios que establece la legislación venezolana vigente, así mismo, puede realizar inversiones o prácticas voluntarias de reconocimiento, formación y desarrollo profesional y humano de las personas que en ella trabajan.
El impacto social de la producción de bienes y servicios
Una empresa tiene impacto sobre la cantidad de clientes y consumidores que beneficia o atiende con su operación. La presencia territorial es un aspecto interesante, ya que no es lo mismo atender exclusivamente en las grandes ciudades que hacerlo en comunidades semiurbanas y rurales; dependiendo de esto, los esfuerzos de la empresa pueden ser mayores, el impacto en el acceso a los bienes y servicios por parte de los consumidores también puede ser superior.
Por otra parte, la cantidad de proveedores que tiene la empresa, la cantidad de proveedores que son nacionales y locales, la cantidad de proveedores que son microempresas o unidades productivas de economía social, repercute también en la economía local. Desde esta perspectiva, la sostenibilidad de una empresa tiene impacto social sobre un conjunto de pequeñas economías, y cuando los proveedores son empresas grandes, las empresas pueden realizar con ellos actividades e iniciativas en conjunto en favor de terceros, como los empleados, los clientes y las comunidades.
Contribución fiscal e inversiones en las comunidades y el país
La contribución fiscal a las autoridades nacionales y locales es un impacto social de la actividad económica. El pago de impuestos a los gobiernos locales y nacionales es lo que favorece el rol y responsabilidad del Estado como garante de los mecanismos de redistribución de la riqueza del país. Una de las principales fuentes de ingresos del Estado es la contribución fiscal aportada por las empresas.
Asimismo, existe un impacto social de la actividad económica constituido por aquellas inversiones que se realicen hacia las comunidades vecinas o hacia la sociedad venezolana. La generación de riqueza se logra en sociedad y también se debe distribuir con ella. Si bien no es un grupo o parte interesada directamente relacionada con la generación de la riqueza como son los dueños, los empleados, los proveedores y los clientes, sin lugar a dudas las comunidades son un grupo que no puede ser excluido.
Una apuesta por la equidad
Desde la perspectiva expuesta podemos ver la distribución de la operación comercial entre los distintos grupos relacionados con la empresa. Se trata de ver cómo se dividen y reparten los pedazos de esa torta que es la riqueza que genera la empresa entre los accionistas, los empleados, los proveedores, los consumidores, las autoridades y las comunidades. Así se puede mostrar que la operación de una empresa beneficia a muchos grupos de la sociedad, además de sus dueños o accionistas, y también es posible diferenciar los beneficios derivados de las obligaciones legales de los que se realizan voluntariamente hacia cada grupo involucrado.
El impacto social de la actividad económica no es lo mismo que las actuaciones responsables, son asuntos distintos. A manera de ejemplos: realizar de manera intencional la selección de personal con trabajadores que habiten en las áreas vecinas a la empresa es una práctica responsable hacia los empleados. Orientar y asesorar a los clientes sobre el consumo más adecuado para la salud o el ambiente es una práctica responsable hacia los consumidores. Privilegiar la compra de bienes a proveedores pequeños es una práctica responsable hacia los proveedores. Acompañar a las autoridades y comunidades en la ejecución de programas sociales es una práctica responsable con la sociedad.
La actividad económica tiene impacto en sí misma, pero puede tener un impacto social mayor incorporando prácticas responsables hacia distintos grupos, apostando por lograr mayor equidad en la sociedad.