Pronunciamiento de Unión Venezolana de Ornitólogos ante el impacto del derrame de petróleo que afecta la costa de los estados Carabobo y Falcón

La Unión Venezolana de Ornitólogos quiere expresar su preocupación por el derrame de hidrocarburos que desde finales del mes de julio se encuentra afectando las costas de los estados de Falcón y Carabobo. En un principio el derrame, cuyo origen se detectó en la Refinería El Palito a través de imágenes de satélite,  alcanzó las playas del Golfo Triste y de Boca de Aroa y ha continuado extendiéndose hasta llegar a los manglares del Parque Nacional Morrocoy. Hasta el momento no se ha recibido ningún anuncio oficial por parte del gobierno de Venezuela sobre las características de los hidrocarburos derramados, la magnitud de este derrame ni sobre los daños causados en las zonas afectadas. Expertos pertenecientes a diferentes universidades, centros de investigación y sociedades científicas del país, han advertido del peligro que supone este derrame de hidrocarburos para los hábitats marinos y dulceacuícolas de la zona, como las praderas de fanerógamas, los bosques de manglar, los arrecifes coralinos y los litorales arenosos. La absorción y acumulación de hidrocarburos en estos ecosistemas afectarán a gran cantidad de peces e invertebrados que habitan en ellos, incluso a  especies con alto valor económico como el Guacuco, la Ostra y el Chipi Chipi.

Como se ha demostrado en casos similares, los impactos de los derrames costeros pueden ser devastadores y pueden durar décadas. Las raíces de los manglares y los arrecifes coralinos pueden sufrir mortalidad masiva al ser cubiertos por los hidrocarburos. La fauna marina (peces e invertebrados) que caracteriza a estos ambientes es altamente susceptible a estos impactos porque los hidrocarburos eliminan  la comunidad de artrópodos, moluscos y otros invertebrados constituyen la dieta básica  Asimismo, la actividad turística local, que depende por completo de la salud ecológica de las playas, arrecifes y manglares, puede colapsar por un plazo indeterminado.

La Unión Venezolana de Ornitólogos es una asociación civil que agrupa a profesionales, estudiantes y aficionados a las aves. Dentro de nuestra misión se encuentra promover el conocimiento científico sobre las aves de Venezuela y actuar como organismo de asesoramiento ante personas e instituciones. Es por esto, que queremos alertar sobre los posibles efectos de este derrame en  zonas reconocidas internacionalmente como Áreas de Importancia para la Conservación de las Aves (AICAs) como es el Parque Nacional Morrocoy y  el Refugio de Fauna Silvestre de Cuare (uno de los cinco sitios Ramsar del país). Ambos sitios albergan una gran  diversidad de aves acuáticas, siendo reportadas más de 90 especies, tanto residentes entre las que se encuentran pelícanos, tijeretas, gaviotas, aves playeras, flamencos, garzas, corocoras, gabanes y patos; así como especies de aves playeras migratorias, que anualmente llegan a Venezuela a partir del mes de agosto para alimentarse en las costas del país y algunas permanecen allí durante el invierno boreal mientras que otras continúan su viaje hasta el sur de Sudamérica.

Las aves acuáticas son muy susceptibles a los derrames de  hidrocarburos, ya que sus plumas al impregnarse de éstos, se enredan y pierden sus propiedades impermeabilizantes y aislantes, reduciendo la flotabilidad y la capacidad de vuelo y, por lo tanto, su habilidad para desplazarse en búsqueda del alimento, lo que suele generar la muerte por inanición. Además, las aves pueden llegar a ingerir el hidrocarburo accidentalmente al acicalar sus plumas, en cuyo caso el ave puede morir envenenada. Otros efectos que se han reportado en aves contaminadas por hidrocarburos son  irritaciones en la piel y lesiones gastrointestinales, pérdida de fluidos, irritación respiratoria y congestión pulmonar, ceguera, estress y shock.

A lo largo de la enorme franja costera que podría ser afectada por el derrame habitan numerosas aves acuáticas. En el caso del Parque Nacional Morrocoy, dichas especies dependen de invertebrados y/o peces para su alimentación, por lo que al ingerir presas contaminadas, pueden morir por intoxicación. Dos de las aves residentes que pueden verse muy afectadas por este derrame son la Polla de Mangle (Rallus longirostris) y la Polla de Wetmore o Polla Costeña (Rallus wetmorei), ya que habitan exclusivamente en bosques de manglar y se alimentan de invertebrados que capturan entre las raíces del mangle. Particularmente, la Polla de Wetmore es una especie endémica cuya distribución se restringe a los manglares desde La Ciénaga en Aragua hasta Chichiriviche en Falcón, por lo que el efecto de este derrame podría reducir aún más las poblaciones, ya de por sí pequeñas; de esta especie en peligro de extinción.

Ante el devastador impacto que el actual derrame petrolero puede causar a las aves acuáticas, a la vida marina en general y a los habitantes de la región afectada, la Unión Venezolana de Ornitólogos se dirige a las autoridades civiles y militares del país para expresar lo siguiente:

1. Es urgente la caracterización química de los hidrocarburos vertidos al ambiente. El desconocimiento de su peligrosidad inmediata y sus efectos secundarios, en particular para la fauna, sólo puede profundizar la gravedad y duración de los impactos.

2. El Ministerio de Ecosocialismo (MINEC), PDVSA y el resto de autoridades ambientales deben tomar acciones urgentes y eficaces para contener el derrame y prevenir la ampliación de sus gravísimos efectos.

3. Las autoridades competentes deben informar al país sobre la magnitud y las consecuencias más probables del derrame de petróleo. Esta información debe compartirse con los países firmantes del convenio Ramsar por cuanto muchas especies de aves migratorias compartidas con Venezuela están gravemente amenazadas por el derrame ocurrido en nuestras costas.

4. El Ministerio Público, siguiendo el debido proceso, debe ejercer de inmediato las acciones jurídicas que establezcan las responsabilidades correspondientes, independientemente de la identidad o cargo que ocupen los responsables del derrame. Quienes por acción u omisión han causado daños sin precedentes a la diversidad biológica y los servicios ambientales de esta región del país deben asumir públicamente sus responsabilidades ante la ley y la sociedad.

Estamos ante una catástrofe ecológica que puede afectar el patrimonio natural y la actividad económica de la zona por décadas, es el momento de evitar daños irreversibles.

Junta Directiva de la Unión Venezolana de Ornitólogos

Caracas, 19 de agosto de 2020